Cómo Florencia de la V. En el Medio del Colectivo

Subo al bondi. Puteo. No entiendo porque mierda los colectivos del orto tiene asiento para 30 personas, pero el colectivero analfa-numérico (??) deja subir a 150. Trato de llevar mi humanidad hacia el fondo, pero un grupo de ancianas desenfrenadas me atropellan cuando ven que se desocupa un asiento. La puta madre, vieja, agarrate de ésta. Tuc. Llego. De repente un bao hediondo a perro muerto, me invade. Miro a mi alrededor, candidatos posibles portadores de tal horrendo aroma, hay varios. Pero un viejo destartalado se lleva los premios. Pienso, viejo la puta que te pario, ¿que vivís en cuba hijo de puta, no tenes jabón?. Se ve que tengo poderes porque el viejo putrefacto se bajo a la media cuadra. Sube una mina con dos pendejos, bolsas colgando por todos lados y los pibes tratando de pasar por el medio de la gente. Se sientan. Uno de los pendejos se cagó, la puta madre. Hoy es un día ideal para estar resfriado y no tener que padecer el barandón espantoso del resto de la gente. Una ráfaga de aire caliente trae hasta mí, el pañal recien horneado del pendejo, que tiene ponele, 3 años. A la madre la putea medio colectivo, estimo. Oíme, pelotuda el pibe ya come locro, por qué carajo no le enseñas a usar el inodoro, la puta que te parió. La cría mas chica le saca la cartera a la madre, [a todo esto la mina está mirando por la ventana y los pibes andan desparramados por todo el colectivo, uno de ellos, inundándonos con olores espantosos]. La madre agarra el celular y vocifera como si tuviera un megáfono que se fue a comprar el conjuntito de ropa interior, y que no tenían talle para ella. El pendejo mas chico, empieza a sacar todo de la cartera, en una le saca el lapiz labial, pienso, pendejo trolo. Para el asombro de todos, el nene se empieza a pintar los labios, a bueno, me digo. La madre, cotorreando y el pendejo disfrazándose de florencia de la V. en el medio del colectivo. Después preguntan cómo, cuándo y dónde, un travesti se hace travesti, tomá. El pendejo cagado, le saca la cartera, se pelean, la madre sigue contando cómo le quedó el babydoll, y a los pibes solo les falta sacar una minifalda fucsia y ya están listos para desfilar. La gente en el bondi se mira. La madre, los mira, estimo que por primera vez en todo el viaje, y se da cuenta que en lugar de dos nenes, ahora tiene a Frutillitas y a Ricitos de Oro. Que manga de trolos, por Dios. La madre los reta, les dice que no. Oíme infelíz, por qué no te bajas y le cambia el pañal al pendejo ese, por Dios!. Sube una nena de 8, 9 años con el padre. Se sienta, el padre se sienta al lado y le dice, ¿y después del de $10 qué viene?, el de $20, le dice. ¿Y después?, el de $30. Y se ríe. Pienso, Malísimo pendeja, malísimo. La nena es fea. Pienso que eso que nos hacen creer de que todos los chicos son lindos es una mentira. Hay pibes feos, cómo esta pendeja. Me cae mal, es una estúpida la nenita. Dice, mirá paaaaaaaaaaa, cómo el de mamá. El padre mira y le dice, sí, si. Miro para ver que miran, me quedo re intrigada porque no veo un carajo, lentes del orto. La pendeja le habla al padre, como una cotorra, y el padre no le contesta. La ningunea, pienso. La pendeja grita, a lot. Nena tenés la voz muy chillona, callate. No me la banco, quiero pararme y pegarle. Ahora banco a los pibitos travestis. Travestis, los banco, pienso. Miro por la ventana y me río, muy onda publicidad de Siempre Libre. El olor del pendejo es insostenible. Es el o yo, pienso, me auto-impongo un ultimátum, si la mina no se baja en la próxima parada me bajo y me tomo un taxi. Efectivamente, me bajo y me tomo un taxi. Puteo a lot.

-------------------------------------------

Para que vean que tengo Cero Instinto Materno, jajajajaja.